Ayer entrando como cada mañana a Twitter para dar los buenos días cúal fue mi sorpresa al enterarme que dos profesionales del mundo de la moto habían perdido sus vidas haciendo lo que más les gustaba y buscándose la vida dentro del duro mundo del motor, Dani Rivas y Bernat Martínez, dos pilotos españoles que dejaban marcado el mundo motero con la trágica noticia de su muerte.
Rápidamente el ambiente en las redes sociales se teñía de respeto, de solidaridad con sus familias, una tristeza generalizada y como no, lanzábamos mensajes de con #RafagasAlCielo por sus almas, como siempre hace todo el que respeta, ama y se siente orgulloso de ser motero.
Nunca dejará de sorprenderme este mundo, al que algunos consideran un mundo de gentuza y de locos, me encanta pertenecer a este mundo, donde el compañerismo se combierte en bandera y donde el único lema que se escucha en estas circunstancias es el del respeto y la admiración.
Poder valorar que nos volvemos vulnerables cuando uno de los nuestros se marcha es digno de admiración, no concibo a todo aquel que intentando hacerse el gracioso de turno hace chistes fáciles sobre tal desgracia, no comprendo si lo que buscan es un minuto de gloria.... pero solo puedo decir que por mi parte y la de otros muchos que conozco solo han conseguido ser repudiados por personas que disfrutan de una misma pasión, EL MOTOCICLISMO.
Aparte de los graciosos, ha existido algún que otro medio de comunicación escrito que ha publicado titulares muy poco acertados. Pero bueno, oportunistas y patéticos existen en todas partes.
Muy orgullosa también de todos aquellos pilotos que hicieron llegar sus condolencias públicamente por lo sucedido, muy admirable su compañerismo, como el de Efrén, haciendo públicos sus vivencias con Rivas, eso les convierte en personas más humanas y cercanas.
Pero ayer me surgieron varias preguntas : ¿Qué está sucediendo en competiciones inferiores? Hace 15 días un terrible accidente dejaba en coma a otro piloto, Kenny Noyes, por fortuna el corrió mejor suerte y sigue luchando para superar la carrera más importante de su vida. ¿Qué se está descuidando en estas competiciones de "segunda"? Y me planteo más cuestiones, como por ejemplo, ¿Qué habría sucedido si estos tres trágicos accidentes hubiesen surgido en la categoría reina? ¿Tiene algo que ver los beneficios que sacan los propietarios de estos eventos para revisar la seguridad y las medidas que hay en ellos? No lo sé, son preguntas que me rondan. ¿Tienen un precio u otro las vidas de estos pilotos dependiendo de la categoría en la que corren? Siendo mal pensada creo sinceramente que sí, pero hay detalles que desconozco, cuestiones que jamás creo que lleguemos a conocer.
No tengo palabras para valorar realmente lo grande, maravilloso y admirable que es el mundo de motociclismo en estas ocasiones. Me siento orgullosa de ser Motera y pertenecer a este mundo.
Deseo que las almas de Rivas y Martínez estén descansando en algún lugar con muchas curvas y donde puedan abrir gas a tope para la eternidad, en todas nuestros corazones moteros estarán ya para siempre.....
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